27 de junio de 2025
El programa económico del gobierno de Javier Milei ha mostrado avances contundentes en el plano macroeconómico: superávit fiscal primario, fuerte contracción monetaria y una tendencia descendente en la inflación. Sin embargo, estos logros conviven con un profundo deterioro en el plano microeconómico, que impacta de lleno en la vida diaria de los argentinos, especialmente de la clase media.
📈 Fortalezas en el plano macroeconómico

En términos fiscales y monetarios, la administración Milei ha logrado revertir una larga era de déficits crónicos y emisión sin respaldo. Por primera vez en más de una década, se alcanzó un superávit primario, acompañado por una drástica reducción de la asistencia del Banco Central al Tesoro.
La inflación, aunque aún elevada en términos interanuales, muestra desde mediados de 2024 una desaceleración sostenida, que ha devuelto cierta previsibilidad al mercado cambiario, facilitado la acumulación de reservas y reducido el riesgo país.
💥 Deterioro en la economía cotidiana
Pero este orden macroeconómico tiene un costo. El ajuste ha provocado un fuerte golpe sobre el consumo, el ingreso real y el bienestar general.
Entre los datos más duros:
- Ventas en shoppings cayeron un 24%
- En librerías y papelerías, un 57%
- En perfumerías y farmacias, un 37%
A esto se suma el aumento abrupto en servicios esenciales:
- Gas: +631%
- Transporte: +707%
- Electricidad: +390%
- Agua: +350%
La clase media es la más afectada: sus ingresos reales cayeron un 7%, mientras que el peso de los servicios en el presupuesto familiar subió del 49% al 59% en un año.
La recuperación parcial de salarios en el último trimestre no logró revertir este cuadro. El poder adquisitivo y la calidad de vida siguen en caída.
⚖️ La paradoja argentina: ¿vamos bien o estamos peor?

Esta es la gran paradoja de la gestión Milei: se ordena la macroeconomía, pero se agrava la situación de la mayoría.
La estabilización de las grandes variables no se ha traducido en una mejora concreta en la economía de los hogares.
El desafío ahora no es solo sostener los logros macro, sino lograr que estos “derramen” hacia la economía real. Si no hay una transición hacia el crecimiento y la mejora del consumo, el costo social puede volverse insostenible.
🔄 Un camino posible para resolver la paradoja
Para convertir el orden macroeconómico en recuperación genuina, se necesita:
- Recomposición de ingresos reales de trabajadores y jubilados
- Reactivación del crédito al consumo y a la inversión productiva
- Alivio fiscal y tarifario focalizado en sectores medios
- Un plan integral de crecimiento con generación de empleo privado genuino
Sin este giro estratégico, se corre el riesgo de consolidar una macroeconomía ordenada pero una sociedad empobrecida, algo que no es sostenible en el tiempo ni políticamente viable.
⏳ ¿Cuánto puede durar el ajuste sin resultados visibles?
Hasta ahora, gran parte de la sociedad ha acompañado el proceso, tolerando privaciones con la expectativa de una mejora futura. Pero la historia muestra que el tiempo social es limitado:
- En Chile (1975), el alivio microeconómico tardó 5 años
- En Alemania (1990), casi 10 años
- En Brasil (1994), 3 años
- En Grecia (2010), 8 años
¿Cuánto tiempo estará dispuesta a esperar la sociedad argentina?
📌 Conclusión
El éxito del modelo Milei no depende solo del equilibrio fiscal, sino de cuán rápido y eficazmente mejore la economía real. El segundo semestre de 2025 aparece como un punto de inflexión: si no hay señales claras de mejora, el consenso que hoy sostiene el ajuste podría empezar a quebrarse.
Una macroeconomía ordenada no se sostiene sobre una microeconomía destruida. La verdadera prueba del programa económico no será el superávit, sino su capacidad para transformar estabilidad en bienestar.
